ENFERMEDADES COMUNES

 

Conocer de forma general las enfermedades más comunes en los perros nos ayuda a saber cuidar mejor a nuestras mascotas y a detectar rápidamente cualquier síntoma de malestar. No olvidemos que una pronta detección mejora enormemente las perspectivas de casi cualquier tratamiento.

En este artículo haremos un repaso general por todas estas enfermedades, señalando los detalles particulares de cada una para ayudarte a identificarlas.

No olvides que la prevención es la mejor forma de evitar que tu perro sufra cualquier enfermedad. Debes síguir de forma estricta el calendario de vacunación para prevenir cualquier problema de salud.

 

 

Coronavirus

Es una enfermedad viral e infecciosa que afecta a todo tipo de perros pero en especial a cachorros aún no vacunados. Se puede detectar en el momento que vemos que el perro tiene abundante diarrea, vómitos e incluso observamos pérdida de peso. No existe vacuna para el coronavirus canino, será el veterinario quien contrarreste los síntomas que provoca la enfermedad.

Hepatitis

Afecta principalmente al hígado y puede tener diferentes causas, entre ellas la vírica. El tratamiento principal se basa en aliviar los síntomas y si no se cura se puede volver crónica, provocando insuficiencia hepática.

Este cuadro evoluciona con rapidez a vómitos y/o diarrea, que se acompañan de una pérdida completa del apetito; en algunos casos la luz intensa causa dolor.

El hígado aparece agrandado y doloroso a la palpación. A medida que la función del hígado se va alterando aparece ictericia y comienzan a sangrar las encías. Llegados a este punto, las mucosas adquieren un color pálido o amarillento (ictericia). El perro presenta los músculos del abdomen tensos y contraídos a causa del dolor y cerca de 1 de cada 5 animales afectados acaba muriendo. Los que sobreviven a la fase aguda se recuperan completamente, aunque pueden tardar muchas semanas en restablecerse.

Moquillo

El moquillo es una enfermedad muy contagiosa que afecta principalmente a perros jóvenes no vacunados o ancianos. No existe tratamiento alguno así que el veterinario realizará una serie de cuidados al perro infectado para contrarrestar los efectos del moquillo, identificado básicamente por secreción nasal además de otros síntomas como fiebre o deshidratación. La vacunación es la mejor forma de prevenir esta enfermedad.

Parvovirus

Es raro que afecte a perros adultos vacunados, este virus mortal aparece especialmente en cachorros y tiene una duración de 10 días en los que, si el perro no recibe el tratamiento correcto, tiene un desenlace fatal. Al igual que casi todas las enfermedades víricas no cuenta con un antídoto concreto, sino que se basa en intentar apaciguar los síntomas del paciente. Los síntomas son depresión, fiebre, debilidad, diarrea y deshidratación.

Generalmente hablamos de síntomas similares a los que provoca la gastroenteritis, por lo que muchas veces se confunde y se detecta de forma tardía. Todos estos síntomas (vómitos, diarrea, fiebre o decaimiento entre otros) provocan una deshidratación muy rápida del animal, por lo que se debe empezar el tratamiento cuanto antes. Aún así, cabe resaltar que no siempre se muestran estos síntomas clínicos en el perro, algunas veces pasan desapercibidos en cachorros muy pequeños o perros ancianos.

En los casos más graves, el parvovirus o la parvovirosis puede producir una disminución de los glóbulos blancos. Por otro lado, si el can afectado es un cachorro menor de tres meses, este puede sufrir una inflamación del corazón. En estos casos no existe diarrea y el cachorro puede fallecer en cuestión de minutos o días.

Si consigue sobrevivir, el daño cardíaco puede llegar a ser tan severo que lo más probable es que acabe con su vida. De esta forma, ante cualquiera o varios de estos síntomas del parvovirus canino te recomendamos que acudas cuanto antes a tu veterinario de confianza para que examine a tu mascota.

Rabia

Conocida y temida, la rabia es una enfermedad tremendamente letal. Se transmite a través de mordeduras, contacto directo con las mucosas o saliva. Se identifica por una violencia extrema sin provocación alguna. Existe una antirrábica que se debe administrar cuando son cachorros, pues una vez infectado, el perro se considera condenado a muerte, no existe vacuna para él.